Hace dos semanas os hablaba de dos abuelines en Valencia, Abu y Yayo. Todos los animales tienen derecho a encontrar una familia pero cuando se pide urgencia para los viejitos es precisamente por temor a que mueran sin conocer una familia para pasar sus últimos dias, meses, años...Fuera de la protectora, claro.
Yayo no lo ha conseguido y es otra espinita clavada en las voluntarias que cuidaron de él. Otro viejete que se va sin haber encontrado un hogar calentito para este invierno.
Descansa en paz precioso...
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