He leido de este osito en el blog de Inés y os voy a copiar el texto tal cual. Que pena, tantos y tantos viejetes que acaban solos, abandonados o sacrificados preguntándose qué habrán hecho y porqué no vuelven sus dueños...
No tenemos derecho a elegir como y con quien nos gustaría vivir. Nuestra vida depende de a quién pertenezcamos, para que sea mejor o peor.
Yo no he podido parar el tiempo y evitar hacerme mayor, ese seguramente ha sido mi mayor pecado. Soy mayor, me he visto solo en la calle sin rumbo, desorientado y sin saber que hacer. Estaba tan agotado y destartalado que quienes me encontraron me recogieron pensando que me tendrían que dormir, nadie daba un duro por mi. Me llevaron al veterinario, me hicieron analíticas, y para su sorpresa di negativo en todo.
Estoy sano, mayor pero sano, y yo me pregunto, ¿donde puedo vivir? ¿hay algún lugar para mi, donde no importe mi edad, 11 años, mi tamaño grandote? Soy muy bueno, no estoy para muchos trotes y me encanta que me quieran.
Seguramente acariciaran la idea de dormirme para siempre y mientras yo me pregunto ¿habrá algún sitio para mi?
CONTACTO: 661 632 933 Maribel / maribelcascamara@hotmail.com
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